Repudio a las declaraciones del Decano de la Facultad de Psicología de la UBA
Desde la Asociación de Psicólogas y Psicólogos de Buenos Aires queremos expresar nuestro rechazo a las opiniones vertidas por el Decano de la Facultad de Psicología de la Universidad de Buenos Aires (UBA), Lic. Jorge Biglieri, expresadas en la entrevista que le realizara la periodista Diana Baccaro en el diario Clarín en la edición del 4 de julio.
El mundo entero enfrenta un problema sanitario extrema gravedad, causante de cientos de miles de muertes y para el cual aún no se ha encontrado vacuna ni tratamiento eficaz; más que prácticas de cuidado preventivas.
Las políticas sanitarias adoptadas por las autoridades de nuestro país han permitido salvar miles de vidas, cuidar la salud y evitar la rápida propagación de la enfermedad, a partir de la estrategia del Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio que aún se mantiene en el AMBA y unas pocas regiones del territorio nacional y de la estrategia de Distanciamiento Social, Preventivo y Obligatorio, que ya se mantiene en la mayoría del país. Así como las otras medidas de prevención recomendadas e implementadas como ser distancia física entre las personas, higiene de manos, ventilación de ambientes, entre otras.
El altísimo compromiso comunitario de nuestra sociedad y la plena comprensión de los riesgos y beneficios ha permitido a la Argentina obtener resultados sanitarios que fueron destacados por diferentes organismos internacionales.
En este contexto es obligación de las instituciones académicas y profesionales de la salud mental contribuir y acompañar el enorme esfuerzo que se realiza a fin de sostener las prácticas de cuidado, promoviéndolas y reconociéndolas.
Las desafortunadas opiniones del Decano de la Facultad de Psicología de la UBA van en el sentido contrario, conspirando, con intención o sin ella, contra la estrategia sanitaria mencionada, al relegar el cuidado de la salud a una mera actitud individual disociada del amparo de la salud colectiva: esta última, responsabilidad ineludible del Estado.
La comunidad no está “encerrada” ni sometida a un “experimento”; se encuentra activamente decidida y comprometida con el cuidado de su salud. Es esta posición activa y explícita la que debe ser fortalecida y acompañada por las instituciones de la salud mental
No hay modo de pensar la salud mental disociada de la salud. Los cuidados ejercidos cotidianamente por la comunidad y el esfuerzo requerido para sostenerlos, nos exigen a los profesionales de la salud mental encontrar las acciones necesarias para que todo ese esfuerzo devenga en eficacia.
En cuanto a la atención presencial psicoterapéutica del ámbito privado, el Decano cae en una imprecisión que debemos señalar. A partir del éxito de la estrategia del Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio y el consecuente control de la transmisión del virus, en muchas provincias han pasado de fase, permitiéndose la misma con el protocolo de cuidados correspondiente. No se trata entonces de una decisión nacional, sino de una autorización jurisdiccional, para la que nuestra institución ha cursado notas al Ministro de Salud y al Director de Salud Mental del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.
Asimismo, queremos remarcar que las psicólogas y psicólogos somos parte fundamental de los equipos interdisciplinarios que se encuentran haciendo frente a la pandemia en todos los niveles de atención, quedando claro que nuestra disciplina sí es considerada esencial por parte de las autoridades sanitarias para el abordaje de la pandemia.
Queda claro que las opiniones del Decano de la Facultad de Psicología de la UBA, no expresan las opiniones de las y los cientos de docentes que cotidianamente desarrollan la enseñanza, la investigación y la extensión en la Universidad de Buenos Aires, sosteniendo el prestigio de dicha unidad académica. Así como tampoco la de miles de graduados y graduadas que ejercen su profesión en los sistemas públicos y privados enfrentando las dificultades de la época, con compromiso ético y profesional.
Son tiempos de acompañar, con responsabilidad y solidaridad.
Lo que nos enferma es la pandemia. La cuarentena es la mejor estrategia encontrada hasta el momento para cuidarnos.
Comisión Directiva
Asociación de Psicólogas y Psicólogos de Buenos Aires